Una de las dolencias más comunes en un gimnasio y en la piscina es el pinzamiento de hombro. Estamos ante una articulación con un amplio rango de movimiento y la mayoría de los ejercicios de levantamiento cargan el peso sobre el hombro.
El pinzamiento del hombro se causa por la irritación de los tendones encargados de su rotación. El manguito rotador está formado por cuatro músculos, y es el que se lesiona e inflama. Existen diferentes causas de esta dolencia, desde la edad hasta una repetición excesiva de un determinado movimiento. Cuando hablamos de deporte, el sobreesfuerzo o la búsqueda del fallo con una técnica incorrecta es lo que puede acentuar su aparición.
Dependiendo de la gravedad, los lesionados deberán seguir ciertas instrucciones y realizar un tratamiento de terapia física. Si sigues los consejos y ejercicios que te proponemos a continuación, será más liviana la curación del pinzamiento. Por supuesto, antes de ponerte manos a la obra, debes consultarlo con un fisioterapeuta que valore tu caso
Ejercicios isométricos
Los ejercicios isométricos que incorporan la articulación del hombro pueden ayudar a tratar un pinzamiento. Este tipo de ejercicio describen la acción de tensar los músculos que rodean una articulación mientras te centras en no mover la extremidad de ninguna manera. Es bastante útil para un pinzamiento en el hombro porque cualquier movimiento puede causar dolor o molestia en la articulación.
Además, los isométricos permiten que los músculos se mantengan en forma, pero sin estresar a los tejidos blandos como los que requieren movimiento. Por ejemplo, puedes apretar una pelota de tenis en la mano mientras flexionas los músculos de la parte superior del brazo.
Añade resistencia
Una vez que el dolor haya menguado y que los músculos de alrededor se hayan fortalecido, será el momento de agregar peso o resistencia en los ejercicios para el pinzamiento del hombro. Realizar ejercicios con un sistema de polea es perfecto para usar resistencia.
Siéntate frente a una polea, levanta lentamente el brazo afectado sujetando un extremo de la polea y tirando del otro extremo con el otro brazo. Este movimiento permitirá que el hombro se levante con la ayuda de tu brazo sano, mientras que la gravedad sirve como resistencia al brazo afectado. Lentamente baja el lesionado a la posición neutral.
Encogimiento de hombros
Otro ejercicio simple que puedes hacer en casa, en el trabajo o en cualquier lugar es el encogimiento de hombros. Mientras estás sentado o de pie, mantén los brazos rectos y a los lados de tu cuerpo. Lentamente encoge tus hombros usando los músculos de tu cuello y espalda para levantar cada uno hacia tus orejas. Mantén esa flexión durante cinco segundos antes de soltar lentamente la retención y volver a su posición inicial. Repite este ejercicio varias veces durante el día para ayudar a fortalecer los músculos responsables de estabilizar los hombros.
Las bandas de resistencia también son una perfecta opción para generar un poco más de resistencia.