En los días fríos de invierno, agradecemos que el sol asome, y es que nos transmite mucha vitalidad y energía. Tomar el sol, y no necesariamente en la playa y en verano, estimula la producción de vitamina D, tan necesaria para el buen estado de los huesos y la asimilación de calcio.
Muchas veces, no somos conscientes de lo realmente importante que es adquirir los beneficios que proporciona el sol. Y es que, éste es imprescindible para todos los seres vivos. Más allá de las razones estéticas, exponerse al sol con las debidas precauciones, nos proporciona un montón de ventajas que no podemos pasar por alto.
Beneficios de tomar el sol
Vitamina D
Tomar el sol estimula la producción de vitamina D, buena para fortalecer los huesos y dientes. Esto se debe a su función de asimilación de calcio. Aunque la mayoría de vitaminas se adquieren a través de los alimentos, la vitamina D se ve favorecida cuando nos exponemos. No hace falta más de diez minutos diarios, para mantener la vitamina D de nuestro cuerpo en los niveles recomendados. Puedes hacerlo por la mañana a primera hora, así los rayos solares no resultan agresivos y su aporte es igual de eficaz.
Fortalece el sistema inmunológico
Si nos acostumbramos a exponernos a los rayos solares de forma habitual, observaremos cómo se fortalece nuestro sistema inmunológico, protegiéndonos de enfermedades e infecciones. Ayuda a fortalecer las defensas de forma natural, sencilla y agradable.
Equilibra los niveles de colesterol
Esto se debe a que, cuando tomamos el sol, la grasa se diluye, permitiendo una mejor salud cardiovascular. Los rayos del sol ayudan a metabolizar mejor el colesterol y a evitar que las arterias se obstruyan.
Mejora el estado de la piel
¡Así es! Mejora los estados alterados de la piel y hace que luzca más saludable. Mejora mucho las pieles con acné y les da un mejor aspecto. Sin embargo, es muy importante usar la protección solar adecuada y no permanecer más de media hora.
Disminuye la presión sanguínea
El sol provoca una vasodilatación de los vasos sanguíneos superficiales y aumenta la circulación de la sangre, disminuyendo así los valores de presión arterial.
Además de los beneficios que te hemos contado, tomar el sol es una excelente manera de levantar el ánimo, mejorar la calidad del sueño y protegernos ante muchas enfermedades.
Tomar el sol es muy saludable y necesario, pero de forma consciente. Ahora que cada vez notamos más cerca la primavera, estamos deseosos de sol, pero hay que tener en cuenta que la exposición debe ser responsable. De este modo, todo serán beneficios a nivel físico y energético.