El herpes es un virus que puede provocar ampollas y llagas en las membranas mucosas. Generalmente afecta la boca o los genitales, y causa su primer brote poco después de la infección, pero el virus nunca se elimina completamente del cuerpo, lo que le permite causar brotes adicionales. Los brotes no solo causan graves molestias, sino que una persona que experimenta un brote puede transmitir el virus a otras personas. Los brotes de herpes pueden ocurrir como resultado de un sistema inmunitario debilitado. Afortunadamente, hay muchos pasos que puedes seguir para mantener tu sistema inmunológico fuerte y mantener el herpes bajo control.