La comida rápida siempre ha de ser de las últimas opciones cuando llega la hora de comer, pero sabemos que siempre hay alguna excusa para darnos un festín. KFC trae de vuelta La Chingona, unas quesadillas con Doritos, queso cheddar, pollo crujiente y salsa Mayo-Mex, que entran por los ojos a primera vista, pero que no son del todo recomendables.
La Chingona vuelve a KFC, unas quesadillas de infarto, literalmente. Regresan por Halloween a un precio de 9,99 euros con bebida y patatas incluidas. Vamos a decir por qué no son tan buena idea como parecen en la foto.
Hemos analizado la tabla nutricional de este plato de KFC y asusta ver la cantidad de calorías que nos vamos a meter en una sentada. Si el plato se comparte entre varias personas, se acompaña de agua y una ensalada, la cosa mejora. Pero… ¿a quién queremos engañar? Este plato es para una persona solo y rara vez la bebida será agua y de acompañante habrá patatas fritas con salsa.
Pero para no salirnos mucho del tema, vamos a analizar al detalle este nuevo plato de KFC. Estamos a las puertas de Halloween, y ver de cerca los hidratos de carbono, sal, azúcares, grasas, calorías, y demás, eso sí que es de susto.
Tabla nutricional de La Chingona
En la web de KFC aparece la información nutricional de todos sus platos y menús, tanto por 100 gramos, como por porción completa, tal y como dicta la ley, ya que los consumidores tenemos el derecho a estar informados de todo lo que vamos a comer, y más cuando nuestra salud se pone en juego. Y en este caso es literal.
La Chingona de KFC es una quesadilla con dos filetes de pechuga de pollo fritos y crujientes, queso cheddar, salsa Mayo-Mex con Doritos y rodajas de tomate natural, todo por 9,99 euros e incluye bebida y patatas. Esta es su tabla nutricional por porción, es decir, el plato completo (solo las quesadillas):
- Kilocalorías: 1.031,11.
- Proteínas: 72,10 gramos.
- Grasas: 53,79 gramos.
- Hidratos de carbono: 70,74 gramos.
- De los cuales azúcares: 4,15 gramos.
- Sal: 7,31 gramos.
Un adulto medio que una vida activa debe consumir una media de 2.000 calorías en un día. Como vemos, solo las quesadillas La Chingona de KFC ya son más de mil calorías en una sola comida, si a eso le sumamos las patatas fritas mediana (264,96 kilocaloría), la salsa kétchup (10,30 kilocalorías) y la Pepsi normal mediana (11,20 kilocalorías), la cantidad de calorías en un solo menú ya rozaría las 1.320 kilocalorías.
A eso hay que sumarle las calorías del desayuno, el tentempié de la media mañana, el almuerzo, la merienda si la hay y la cena… Un coctel molotov de calorías que solo podría sostenerse haciendo mucho ejercicio de forma regular, y España sigue estando entre los países más sedentarios.
Versión saludable y casera
Hay días en los que queremos saltarnos la alimentación saludable y darnos un capricho, y no pasa nada. Es algo que todos hacemos, porque nos calma, nos hace felices y nos ayuda a sobrevivir en esta vorágine de días llenos de estrés, trabajo, gimnasio, problemas personales, etc.
Pero, aunque llevemos una dieta muy saludable, no conviene caer en exceso en este tipo de comidas insanas, y dejarlas para ocasiones muy concretas y espaciarlas bien en el tiempo. Por eso proponemos una opción más saludable de las quesadillas La Chingona de KFC.
Esas mismas quesadillas las podemos hacer en versión saludable con más vegetales verdes como canónigos, lechuga, pepinillo, espinacas o similares; en lugar de pollo frito, poner pavo a la plancha, pollo al vapor, Heura, carne de The Vegetarian Butcher, o similares; que la tortilla sea integral y el queso podemos elegir uno saludable como mozzarella, emmental, gouda, o cheddar de buena calidad con un alto contenido en leche. También podemos usar queso vegetal, o si no nos gusta el queso, usar otro ingrediente.