Si te llamó la atención descubrir que podemos escuchar música bajo el agua mientras nadamos, te vas a quedar helado cuando conozcas cómo funcionan los auriculares de conducción ósea. Sí, auriculares que no cuentan con dispositivo para introducir en el oído, y que además transmiten la música por tus huesos.
La posibilidad de disfrutar de música o podcasts mientras entrenamos es algo que muchos de nosotros anhelamos. Sin embargo, muchos tememos los riesgos que conlleva el uso de auriculares que tapan los oídos, especialmente al correr cerca de una carretera o al montar en bicicleta. ¡Pero no te preocupes! Los auriculares de conducción ósea hacen que tu experiencia de escuchar audio sea mucho más segura y placentera.
¿Cómo funcionan los auriculares de conducción ósea?
Es evidente el funcionamiento que tienen los auriculares tradicionales, ¿no? Estos auriculares reciben una señal desde un dispositivo, generando ondas audibles que se canalizan hasta el oído. Sin embargo, a diferencia de los clásicos, los de conducción ósea convierten esas señales eléctricas en vibraciones que se transmiten a través de los huesos hasta el oído interno.
Estos dispositivos se colocan justo en el hueso que está delante de la oreja, al lado del pómulo. Desde allí, las vibraciones se transmiten hasta el oído, produciendo la magia. Ahora bien, es importante mencionar que la música no se escucha en el exterior como sucede con unos altavoces. Solo la persona que lleva los auriculares puestos puede escuchar el sonido, ya que las ondas viajan únicamente por los huesos.
Como no hay taponada la oreja, el usuario es capaz de escuchar el ruido externo al mismo tiempo que disfruta de la música en sus oídos internos. Esto no solo permite estar consciente del entorno, sino que también es beneficioso para monitorear la respiración mientras se hace ejercicio, algo que muchos pasan por alto, pero que puede ser señal de un bajo rendimiento deportivo.
Pese a ser comodísimos y totalmente revolucionarios, la tecnología detrás de ellos no es apta para todos los bolsillos. Puedes encontrar unos buenos a partir de 80€, aunque siempre podrás recurrir a una versión low cost.
¿En qué se diferencian los auriculares de conducción ósea de los tradicionales?
Los auriculares tradicionales utilizan altavoces para emitir ondas sonoras cerca o dentro del oído, mediante un proceso denominado conducción del aire. En este proceso, el sonido entra en el canal auditivo y hace vibrar el tímpano. Esto mueve los huesos del oído medio, que a su vez transfieren el sonido a la cóclea del oído interno. Desde ahí, las vibraciones se convierten en señales eléctricas que se envían al cerebro para que podamos experimentar el sonido.
Por el contrario, los auriculares de conducción ósea saltan la mayor parte de esa anatomía y envían las vibraciones directamente a la cóclea, utilizando dispositivos que convierten el sonido en vibraciones. Los dispositivos se llaman transductores y se sujetan firmemente contra el hueso mediante una banda que abraza la cabeza. Los transductores deben permanecer en su sitio para poder enviar audio al hueso. La mayoría de los diseños colocan dos transductores contra cada pómulo, justo delante de las orejas.
Además, estos dispositivos incluyen una cinta que une las orejas y luego la parte posterior de la cabeza, conectando ambos dispositivos. La conexión Bluetooth envía el audio desde un dispositivo móvil a los auriculares, que hacen vibrar los pómulos y envían los sonidos al oído interno.
Este método de comunicación es realmente innovador y, como hemos mencionado, permite disfrutar de música sin perder la conciencia de tu entorno. Sin embargo, también es crucial entender algunas consideraciones al utilizar auriculares de conducción ósea.
¿Qué hay que tener en cuenta cuando se usan auriculares de conducción ósea?
Una gran parte del marketing de estos dispositivos destaca que los auriculares de conducción ósea ofrecen una mayor conciencia del entorno en comparación con los auriculares tradicionales que se colocan en la oreja. Esto es en gran medida cierto, pero hay que tener en cuenta algunas ventajas y precauciones al utilizarlos.
Una de las razones por las que estos auriculares ayudan a los corredores a mantener la conciencia del entorno es que permiten múltiples entradas de sonido. Sin embargo, un principio denominado enmascaramiento puede significar que no se perciben todos los sonidos del exterior. No oirás los ruidos del entorno tan bien como lo harías si no llevaras ningún tipo de auriculares, a pesar de que los auriculares de conducción ósea mantienen los canales auditivos abiertos. Esto no es un motivo para evitar el uso de auriculares, pero es algo que hay que tener en cuenta.
Este tipo de enmascaramiento es diferente al que se produce con los auriculares que se colocan dentro del oído, donde los sonidos cercanos deben pasar o rodear el auricular antes de entrar en el canal auditivo y competir con el audio de los auriculares. Algunas personas, como Portnuff, utilizan auriculares de conducción ósea al correr al aire libre, aunque “no son dispositivos intrínsecamente seguros”, advierte, porque pueden distraer y seguir tapando algunos sonidos exteriores. “Pero presentan la ventaja de no taponar los oídos y crear un sello que bloquea físicamente otros sonidos”.
¿Qué debe saber antes de comprar unos auriculares de conducción ósea?
Si estás considerando la compra de auriculares de conducción ósea, es importante que elijas cuidadosamente. “He visto anuncios de dispositivos que se llaman auriculares de conducción ósea y que en realidad no lo son”, dice Portnuff. Se recomienda buscar dispositivos que aparenten ser robustos, con una diadema que sujete el dispositivo firmemente al hueso y evitar aquellos que cuelgan de una cinta alrededor de la oreja y no tienen una diadema.
Un buen par de auriculares de conducción ósea pueden ser muy beneficiosos para los corredores, permitiéndoles estar alerta de todo lo que ocurre a su alrededor. “Pueden proporcionarte un mejor conocimiento del entorno, pero solo si eliges niveles de sonido que te permitan oír lo que hay alrededor de lo que escuchas”, así como elegir auriculares que realmente funcionen.
¿Debería no usar nunca auriculares de conducción ósea?
Si buscas una experiencia de audio de altísima calidad, quizás los auriculares de conducción ósea no sean la opción más adecuada para ti. La conducción ósea no ofrece la misma calidad de sonido que los auriculares tradicionales que envían el sonido a través del aire.
Además, en situaciones en las que quieras mantener alejados otros sonidos, como en un autobús o un tren, los auriculares de conducción ósea pueden no ser tu mejor opción. Se pueden combinar con tapones para los oídos en un avión, pero no bloquearán el ruido del motor tanto como lo harían los auriculares normales.
Finalmente, si te encuentras en una calle con mucho tráfico o en un lugar donde necesitas estar atento a los sonidos del entorno mientras corres, puede que sea mejor prescindir de los auriculares. Es fundamental ajustar el volumen para evitar molestias al utilizar este tipo de dispositivos.
