Cada vez son más las personas que tienen tatuajes a cualquier edad. Estos se están volviendo menos juzgados en el ámbito laboral y social, por lo que es posible que veamos a varios compañeros de trabajo o jefes luciendo tatuajes visibles.
La popularidad de esta pintura corporal perenne puede hacer creer que no es tan arriesgado para la piel, pero hacerse un tatuaje conlleva un mínimo peligro. Insertar una aguja cubierta de tinta en la piel tiene el potencial de introducir materias extrañas o infecciones en el cuerpo. Hacerse un tatuaje con un tatuador o una tienda que no limpia adecuadamente sus herramientas, o que no te aconseje las instrucciones adecuadas para mantenerlo limpio, puede provocar afecciones, infecciones u otros problemas de salud en la piel.
Principales causas de infección
La inyección de tinta introduce sustancias en el cuerpo que nuestro organismo no suele encontrar. Ya sean componentes de la tinta o bacterias, virus u otros patógenos, existe el riesgo de una infección o reacción.
Bacterias y virus
El material y la tinta contaminados pueden introducir bacterias en el lugar de la herida. Varias especies de bacterias pueden causar infección después de un tatuaje, que incluyen estafilococo y estreptococo. Algunos de estos patógenos responden a los antibióticos, pero otros no. Si alguien desarrolla una infección y no busca ayuda médica, puede provocar complicaciones, como infecciones más profundas y, en casos raros, sepsis, que puede poner en peligro la vida.
Cualquier persona que tenga signos de una infección, incluidos fiebre y escalofríos, debe consultar a un médico. Las condiciones que pueden resultar de una infección bacteriana o viral pueden ser impétigo, celulitis, herpes simple, verrugas virales, infección atípica por micobacterias, sífilis, hepatitis viral o VIH.
Tinta contaminada
En algunos casos, el uso de tinta contaminada o diluida con agua sin esterilizar puede provocar una infección.
Hace unos años se dio el caso de un brote de la bacteria Mycobacterium chelonae. Esta causa infecciones de la piel y los tejidos blandos. Los síntomas incluyeron una erupción persistente con enrojecimiento, hinchazón y postillas en la zona del tatuaje. En este caso, varios tatuadores habían usado una tinta prediluida que tenía contaminación antes de comprarla.
Para quedarte más tranquilo, lo más recomendable es hablar con el tatuador para que te cuente de dónde proviene la tinta.
¿Cómo saber si un tatuaje está infectado?
El síntoma más común de una infección por tatuaje es una erupción o piel roja con bultos alrededor del área del tatuaje. En algunos casos, la piel puede estar irritada por la aguja, sobre todo si tenemos la piel sensible. Si este es el caso, los síntomas deberían desaparecer después de unos días.
Pero en el caso de que continúen durante una semana o más, se recomienda acudir al tatuador o a un médico de urgencia. Sobre todo, es aconsejable ir si notamos alguno (o varios) de los siguientes síntomas:
- Fiebre
- Cambios de calor y frio
- Temblores anormales
- Hinchazón del área tatuada
- Pus saliendo de la zona
- Lesiones rojas alrededor del área
- Rayas rojas en el tatuaje
- Zonas de tejido duro y elevado
La infección es relativamente poco común después de un tatuaje, pero pueden ocurrir otras reacciones. Por ejemplo:
- Síntomas nuevos o que empeoran de una afección cutánea existente, como la psoriasis.
- Reacciones cutáneas, como dermatitis alérgica de contacto y dermatitis fotoalérgica.
- Una erupción roja e inflamada y piel escamosa y descamada, dependiendo de la reacción.
Tratamientos para tatuajes infectados
Los bultos y las erupciones leves generalmente se pueden tratar en casa con un ungüento antibacteriano, una limpieza adecuada y descanso.
Si tenemos una infección, el tratamiento depende de la causa. El médico puede tomar una muestra de la zona tatuada o perforar una bolsa de pus (si hay una) para ver qué bacteria o virus está causando la infección. En la mayoría de los casos, el médico puede recetar un antibiótico para ayudar a detener la infección. En casos graves de infección en tatuajes, los tratamientos con antibióticos pueden durar semanas o meses.
Si la infección fue causada por la bacteria MRSA, es posible que los antibióticos no sean beneficiosos. Si MRSA causa una bolsa de tejido con pus, el médico puede drenarlo en vez de dar antibióticos. En casos raros de infección, es posible que se requiera cirugía. Si el tejido ha muerto debido a la infección (necrosis), es posible que sea necesario realizar una cirugía para extirparlo.
Las protuberancias persistentes, a veces incluyen picazón y dolor en el tatuaje pueden ser signos de una infección micobacteriana atípica. Esto requiere un tratamiento con antibióticos a largo plazo.
¿Se puede evitar tener tatuajes con infección?
Antes de hacerte un tatuaje, se recomienda averiguar si somos alérgicos a algún ingrediente de la tinta del tatuaje. Asegúrate de preguntar al tatuador qué ingredientes contienen sus tintas. Si eres alérgico a alguno de los ingredientes, pode una tinta diferente o evita hacerte el tatuaje definitivamente. Sin embargo, ten en cuenta que puede ser difícil saber qué contienen exactamente las tintas para tatuajes, ya que no están reguladas de ninguna manera.
Asegúrate de que todos los artículos que toquen la piel hayan sido esterilizados adecuadamente. No dudes en preguntarle al profesional sobre cómo esterilizan sus instrumentos y si cumplen con las normas de seguridad. Recuerda que es tu salud la que se pone en riesgo y una mala decisión puede tener un fatal resultado.
Otras cosas a considerar antes de hacernos un tatuaje deben ser:
- Licencia del centro de tatuajes. Los centros con licencia deben ser inspeccionados por una agencia de salud y cumplir con ciertos requisitos de seguridad para permanecer abiertos.
- Buena reputación. Se recomienda visitar algunos centros de tatuajes antes de decidirte a hacer un tatuaje. Esto ayudará a conocer si es realmente seguro y muestra confianza. Leer reseñas en internet o escuchar recomendaciones de boca a boca son buenas formas de evaluar si es una apuesta segura.
- Normas de seguridad e higiene. El tatuador debe usar una aguja nueva esterilizada cada vez que se inicie un tatuaje. También deben usar guantes en todo momento y limpiar la camilla antes de que te subas.
Si el tatuador da instrucciones sobre cómo cuidar el tatuaje, te recomendamos seguir estas pautas. No obstante, si no te informaron sobre los cuidados, lo mejor es llamar para saber qué trucos se deben realizar. En general, debemos hacer lo siguiente para asegurarnos de que el área sane correctamente:
- Quítate el vendaje de 3 a 5 horas después de hacerte un tatuaje.
- Lávate las manos con agua y jabón antibacteriano (pH neutro).
- Usa un paño limpio y seco o una toalla de papel para dar palmaditas en el tatuaje (para secarla y eliminar la sangre, el suero o el exceso de pigmento).
- Deja que la zona se seque al aire durante unos minutos.
- No lo frotes para secarlo, esto puede dañar la piel.
- Aplica un ungüento (no una loción), como vaselina o Bepanthol.
- Limpia el exceso.
- Repite estos pasos unas 4 veces al día durante al menos 4 días.
También existen otras técnicas, como Saniderm o Dermalize, que permiten pegar un apósito en el tatuaje y evitar tener que estar lavándolo cada pocas horas. Una vez que la zona tatuada comienza a formar costras, lo mejor es usar una crema hidratante o loción para evitar que la piel se seque o se dañe demasiado. No rasques ni pellizques la piel. Esto puede hacer que la zona se cure de manera inadecuada, lo que puede hacernos más susceptible a las infecciones. Incluso, se podría eliminar parte del tatuaje y necesitaríamos repasarlo.