Existe la idea errónea que defiende que, para perder peso, hay que comer poco. ¡Error! Sea cual sea tu objetivo, perder peso o ganar volumen, debes respetar las ingestas diarias recomendadas. Éstas giran en torno a cinco comidas, como mínimo. Por ello ten presente siempre, la importancia de los almuerzos y meriendas saludables en tu dieta.
¿Qué ocurre cuando no respetamos los almuerzos y meriendas?
Ya sea porque no tienes hambre o tiempo; o porque piensas que comer menos beneficiará a tu dieta, no te saltes ninguna comida. Si lo haces, puede ser que te notes algo bajo de energía, sin embargo, tiene otros efectos sobre tu cuerpo.
Para empezar, se alterarán tus niveles de glucosa en sangre. Cuando te saltas alguna comida, tu cuerpo intenta encontrar la manera de obtener energía en sus reservas y tu metabolismo se ralentiza. Si, además, practicas ejercicio de una intensidad moderada, debes aportar a tu organismo del alimento que necesita para poder rendir. De lo contrario, estarás perjudicando tu salud, pudiendo tener numerosas consecuencias negativas.
Pero ¡cuidado! Que te estemos recomendando una ingesta entre el desayuno y la comida; y otra entre la comida y la cena, no quiere decir que esté todo permitido. Estas comidas, aunque bastante más ligeras que las principales, deben ser saludables. No es lo mismo almorzar y merendar, que picar entre horas. Para inspirarte, puedes consultar ideas de meriendas saludables para niños en este enlace.
¿Por qué 5 comidas diarias?
- Principalmente porque en tres comidas, únicamente, no podemos ingerir todos los nutrientes que necesitamos. No nos da tiempo a tomar la ración de frutas y verduras, por ejemplo, en tan solo tres tomas.
- Si pasamos varias horas en ayunas, nuestro cuerpo entra en alerta y empieza a ahorrar energía y acumular grasa para poder rendir. Para evitar esta acumulación tan contraproducente e innecesaria de grasa, hay que evitar estar más de 3 horas sin comer.
- Comer las veces que corresponde, incluyendo almuerzo y merienda, evitamos llegar a la siguiente toma con demasiada hambre. Así que no corremos el peligro de engullir una cantidad de comida más elevada de la que realmente necesitamos.
Recuerda, toma 5 raciones de comida diarias, siendo el desayuno y la comida, las más fuertes. Comer a lo largo del día no significa hincharse y acabar llenos cada vez. La razón principal, es la importancia de los almuerzos y meriendas saludables para mantener un equilibrio en tu alimentación y evitar estados de alerta que puedan perjudicarte.