Muchos de nosotros vivimos a base de tuppers, tanto para comer en casa como para llevárnoslo al trabajo. Hace unos años descubrí una de las mejores formas de ahorrar tiempo a la semana y evitar comer mal. Detesto cocinar, así que dedico un día a hacer la mayor cantidad de comidas para toda la semana. Así me aseguro que nunca voy a tener la tentación de optar por la comida rápida o alimentos poco saludables. Evidentemente, esas comidas las guardo en tuppers y se van consumiendo a lo largo de la semana. Te aseguro que ahorras mucho tiempo.
El problema surge cuando tienes que calentar determinados platos. Lo primero que tienes que tener en cuenta es que el tupper esté diseñado para calentarse en el microondas, siendo los de cristal la mejor opción siempre. Y lo segundo que debe preocuparte es cómo guardar determinados platos y saber si se pueden recalentar. Hay muchos alimentos que se convierten en caldo de cultivo de muchas bacterias o infecciones alimenticias. ¿Estás preparado para aprender a cuidarte mejor?
Arroz
Ya no solo es uno de los alimentos favoritos para los deportistas fitness, sino que también es muy recurrente para llevar al trabajo. El principal peligro reside en el proceso de cocinado. El grano del arroz contiene esporas de bacterias, que si no cocinamos bien puede hacer que se multipliquen. A pesar de que hayamos hervido el arroz, si no lo hemos hecho de manera adecuada es posible que sobrevivan y empeoren con el recalentado del microondas.
Además, cuanto más tiempo pase el arroz a temperatura ambiente, más posibilidades existen de que se sigan desarrollando agentes tóxicos. Lo ideal es tomarlo recién cocinado, y en caso contrario meterlo en el frigorífico antes de una hora, y que no pase más de 1 día hasta su consumo.
Pollo
El problema de recalentar ciertas carnes es que pierdes algunas propiedades nutricionales, como parte de su composición en vitamina B12. Además, es importantísimo asegurarnos de que están bien cocinadas. La carne de ave puede contener salmonela y si no la cocinamos lo suficiente, aumentaremos el riesgo de enfermedad.
Te habrás dado cuenta de que la mayoría de microondas no calientan todas las partes de la comida por igual. Asegúrate de que no queden partes rosadas y que todo esté a una temperatura homogénea.
Patatas
A pesar de ser otro alimento básico, tanto en purés como en guisos o aliños, las patatas pueden desarrollar la bacteria Clostridium botulinum. El riesgo aparece cuando dejamos que se enfríe a temperatura ambiente hasta su consumo. Lo ideal es meter las patatas en el frigorífico hasta que nos decidamos a consumirlas.
Champiñones
Las proteínas que aportan los champiñones pueden destruirse con facilidad por culpa de microorganismos y enzimas. Lo más recomendable es mantenerlos a temperatura ambiente una vez que los hemos cocinado. Cuando se recalientan en el microondas, tienden a deteriorarse; aunque si los has guardado en frío (no durante más de 24 horas), no existe ningún problema siempre que los recalientes a menos de 70º.