Hay una capa protectora en la parte inferior del pie conocida como fascia plantar, que se extiende desde el talón hasta la base de los dedos. Su función principal es absorber el impacto generado al caminar, salvaguardando el pie. Sin embargo, realizar actividades que ejerzan una tensión excesiva en las extremidades inferiores, como correr, puede provocar inflamación o estiramiento de la fascia plantar, lo que resulta en una afección llamada fascitis plantar. Normalmente, esta dolencia se trata con medicamentos antiinflamatorios, que pueden complementarse con diversos remedios para acelerar el proceso de recuperación.
En este artículo vamos a contarte cuáles son los mejores remedios para la fascitis plantar.
Remedios para la fascitis plantar
La detección de la fascitis plantar no es inmediata. Pueden pasar varios meses antes de que los síntomas se vuelvan notorios. En consecuencia, es recomendable consultar rápidamente a un profesional de la salud una vez que se manifiesten estos síntomas. Un médico realizará un examen de rayos X de tus pies para evaluar posibles lesiones adicionales, como un espolón en el talón. Por lo general, se recetarán medicamentos y se derivará a un fisioterapeuta. Es importante determinar la causa subyacente de la afección para optimizar la eficacia del tratamiento.
Aplicación de hielo
Para aliviar las molestias que produce la fascitis plantar, la aplicación de hielo en la zona afectada es el remedio casero más eficaz. Si no tienes bolsas de hielo o compresas frías, simplemente envuelve hielo triturado en un paño limpio y colócalo en la planta del pie durante 15 minutos. Esto ayudará a reducir la inflamación y posteriormente aliviará el dolor. Se recomienda repetir este proceso cuatro veces al día.
Masajear
El dolor más intenso de la fascitis plantar suele experimentarse por la mañana, por lo que se aconseja estirar y masajear la zona afectada antes de levantarse de la cama. Con el pulgar, realiza pequeños movimientos circulares comenzando desde el talón y avanzando hacia los dedos de los pies. Cada masaje no debe durar más de diez segundos, y también puedes realizarlos después de periodos prolongados de estar sentado o acostado.
Aplicar frío
Otro remedio casero muy eficaz para la fascitis plantar es utilizar objetos cilíndricos, como botellas o latas de frío, para realizar masajes. Este tipo de estiramiento ayudará a masajear y fortalecer todo el arco del pie, brindando alivio al dolor causado por la inflamación de la fascia plantar. El tratamiento de la fascitis plantar es un proceso sencillo que implica el uso de un objeto cilíndrico frío y vendajes funcionales. Para empezar, busca una silla o sofá para sentarte y coloca el objeto frío en el suelo. Luego, coloca suavemente el pie lesionado sobre el objeto y realiza varias pasadas, aplicando una ligera presión. Esto se puede hacer hasta tres veces al día.
Vendajes funcionales
Los vendajes funcionales son un remedio esencial para curar la fascitis plantar. Para crear el vendaje, necesitarás cinta adhesiva del tipo esparadrapo. Comienza cortando una tira y colocándola justo debajo de la parte delantera de la suela, asegurándote de que envuelva todo el pie. Luego, toma otra tira, colócala en un extremo y guíala en diagonal hacia el talón, dando vueltas alrededor de ella antes de dirigir la cinta de regreso al punto inicial. Repite este proceso en el otro extremo para crear una cruz en la planta de tu pie. Finalmente, asegura el vendaje aplicando otra tira sobre los extremos de las cintas anteriores, de forma similar a como aplicaste la primera.
Es fundamental evitar que el vendaje se moje, ya que esto disminuiría su eficacia para reparar la fascitis. A lo largo de la noche, se recomienda sustituir el calzado por una férula para asegurar un estiramiento continuo de la fascia plantar durante las horas inactivas de la noche, favoreciendo una pronta recuperación. Es fundamental utilizar calzado adecuado para tratar eficazmente la fascitis plantar. Idealmente, el calzado debería brindar soporte integral a todo el pie, absorber el impacto de caminar y tener un talón ligeramente elevado para minimizar la tensión y la presión sobre la fascia. Si es necesario, utiliza plantillas diseñadas específicamente para esta afección.
El proceso de curación de la fascitis plantar no es rápido. Requiere mucho tiempo para una recuperación completa. Como resultado, es esencial mantener la paciencia y la constancia al utilizar remedios caseros y medicamentos antiinflamatorios. Además, se recomienda encarecidamente buscar la orientación de un fisioterapeuta para mejorar el proceso de curación.
Remedios naturales para la fascitis plantar
Hay remedios naturales disponibles que poseen propiedades analgésicas y antiinflamatorias que pueden aliviar eficazmente el dolor.
Sales de Epsom
El sulfato de magnesio, comúnmente conocido como sal de Epsom, posee la capacidad de aliviar las molestias derivadas de la fascitis plantar al inducir la relajación de los músculos de los pies.
Este ingrediente no sólo posee propiedades antiinflamatorias y calmantes, sino que también ayuda a mejorar la circulación. Para preparar la solución, combina 5 tazas de agua, lo que equivale a 1250 ml, con 4 cucharadas de sales de Epsom, con un peso aproximado de 40 g.
Para conseguir la temperatura ideal para el baño de pies, calienta el agua con cuidado, procurando que no esté demasiado caliente para evitar molestias o quemaduras. Una vez alcanzada la temperatura deseada, incorpora las sales de Epsom al agua revolviendo bien hasta que se disuelvan por completo.
Descansa tus pies durante 20 minutos mientras los remojas. Continúa este tratamiento hasta que se alivie el problema.
Jengibre
Según un estudio realizado por la Universidad de Isfahan en Irán, el gingerol, un componente activo que se encuentra en el jengibre, posee características analgésicas y antiinflamatorias que alivian eficazmente el dolor asociado con la fascitis plantar.
Se pueden aprovechar los beneficios de esta especia ya sea consumiéndola en infusión o aplicando su aceite esencial mediante masajes terapéuticos.
Para preparar una bebida con infusión de jengibre, combina 1 cucharada de jengibre rallado (equivalente a 10 gramos) con 1 taza de agua (equivalente a 250 mililitros). Una vez que el agua alcance el punto de ebullición, incorpora el jengibre rallado al líquido burbujeante. Deja reposar la mezcla por un período de 5 a 10 minutos. Puedes tomar hasta 2 tazas al día.
Espero que con esta información puedan conocer más sobre los remedios de la fascitis plantar.