Seguramente hayamos visto a muchos perros con chalequitos, chubasqueros, bufandas, calcetines, jerséis, etc. A lo largo de este texto vamos a salir de dudas, porque muchas veces creemos que es innecesario proteger del frío a los perros porque creemos que ellos tienen mayor resistencia a las bajas temperaturas.
Los perros, al igual que otros animales y que nosotros, los humanos, tienen cierta resistencia al frío y al calor. Es cierto que, por genética, tamaño, pelaje, edad, peso, etc. unos perros son más resistentes a ciertas temperaturas que otros. Pero este pensamiento no debe nublarnos el sentido común. Por ejemplo, si tenemos un pastor alemán es probable que a 10 grados el perro esté relativamente bien y a 35 grados esté muerto de calor, sin embargo, un pequeño de tamaño pequeño como un chiguagua, con 10 grados estará hipotérmico y con 35 grados tendrá calor, pero lo podrá soportar bien.
El Gobierno de España lanzó una gráfica donde se observa el umbral del frío que soportan los principales tamaños de perros, es decir, pequeño, mediano y grande:
Con esta gráfica en la mano, vamos a ver si es necesario vestir a perros, cuándo, que razas, etc. Aquí entra el sentido común y las necesidades de cada animal, por ejemplo, si es un cachorrito, es normal que tenga frío, o si está enfermo es más propenso a tener frío que uno que está sano y correteando por casa.
Vestir a los perros, ¿sí o no?
Antes de entrar a valorar cómo debemos vestirlos y cómo no, hay que entrar a explicar otros factores. Es decir, que sí podemos y debemos vestir a nuestros perros, pero siempre y cuando nuestros canes entren en alguno de estos grupos, aunque no es obligatorio. Con esto queremos decir que, nuestro perro puede ser de tamaño pequeño y con poco pelo y no temblar de frío, así que no sería obligatorio ponerle un abrigo, pero sí quizás algo para protegerlo de la lluvia.
- Perros pequeños o de pelo muy corto y poca cantidad: si nuestro can es un perro inferior a 10 kilos o tiene poco pelo, sí deberíamos vestirlo adecuado a la climatología, sobre todo si tenemos temperaturas muy bajas. Tampoco es recomendable sacarlo a pasear con temperaturas por debajo de los 3 grados bajo cero, ya que ahí sufriría demasiado.
- Perros mayores o enfermos: este grupo de perros ha de estar siempre bien protegido de los cambios de temperatura, por lo tanto, habrá que reeducarlos y enseñarles a orinar en un sitio concreto de casa, para que no sufran el frío del invierno. En todos los paseos, en el jardín, patio y en casa, siempre con chalecos, abrigos y mantitas.
- Perros frioleros: todos tenemos un perro más friolero que otro, aunque sean de la misma edad, raza, tamaño, etc. Igual que nos pasa a los humanos, cada uno tiene su umbral del frío, así que habrá que adaptarse y protegerlo para que sea feliz y viva a gusto.
- Lluvia, nieve, viento frío, etc.: si las condiciones climatológicas son adversas a la hora de pasear e ir al parque, igual que nosotros nos podemos un abrigo, unas botas, bufanda y demás, lo mismo se merecen ellos, así que sí, aunque sea un chubasquero para la lluvia, pero hay que protegerles en todo momento.
No hay que humanizar a los perros
Muchos expertos no recomiendan vestir a los perros ni a los animales en general, pero nosotros, tras hablarlo con 2 veterinarios y en base a nuestra propia experiencia, creemos firmemente que no hay que humanizar a los perros, pero nosotros no apoyamos eso, apoyamos el hecho de protegerles del frío en situaciones concretas como enfermedades, lluvia y paseos con bajas temperaturas.
En ningún momento vamos a apoyar «vestir al perro a la moda», es más, eso nos parece un maltrato. Un perro no necesita ropa, él ya tiene su propio pelaje, todo lo extra le causa molestias, incomodidad, picores, etc. No estamos a favor de teñir el pelo, ni hacer peinados tirantes, ni cortar orejas ni rabo, ni vestir a nuestro perro con un tutú, con unas deportivas tipo Nike, ni con unos pantalones vaqueros. Son animales y merecen el mismo respeto que nosotros.
El usar ropa impide que el animal puede regular su temperatura de forma natural, pero nosotros como humanos y seres conscientes, si vemos que nuestro can tiene frío, pues lo protegemos, no es humanizar, es cuidar. Humanizar es sentar al perro en la mesa, tratarlo como a un niño pequeño, atribuirle emociones que realmente no tiene, darle la misma comida que come su dueño humano (actitud totalmente prohibida y que pone en riesgo la vida del perro), etc.
Consejos para elegir la ropa
Vestir a los perros parece muy fácil, pero vamos a dar algunos consejos básicos para conseguir la prenda perfecta y que sea cómoda, segura y cumplan su función. Aquí lo importante es proteger al perro del frío, no el dibujo del abrigo, así que la moda la dejamos guardada.
En un momento de necesidad nos puede servir un chaleco nuestro o una camiseta, pero lo más adecuado es que compremos ropa adaptada a él y a las necesidades climatológicas. Recordemos que la ropa solo se usa cuando sea estrictamente necesario.
- La prenda debe cubrir desde cuello hasta el lomo y llegar al comienzo de la cola.
- Si nuestro perro pasa mucho tiempo fuera, como, por ejemplo, un jardín es conveniente comprarle una especie de bufanda o braga para mantener su cuello y garganta siempre a buena temperatura.
- Los tejidos han de ser cómodos, sin costuras, de la talla adecuada, no muy apretados.
- Que sean de materiales hipoalergénicos.
- Se puedan lavar en lavadora.
- No limiten sus movimientos.
- Que no impidan respirar adecuadamente.
- Solo elegir prendas prácticas y útiles para los momentos de necesidad. Nada de disfrazar al perro o gato. Para ellos no es divertido, es humillante.
- Que se pueda usar arnés encima o debajo. (Siempre recomendamos el arnés, en lugar del collar al cuello, por seguridad, salud, comodidad, recomendación médica, para evitar fugas inesperadas, etc.).
- Prendas transpirables y que cumplan su función, es decir, que proteja de la lluvia y/o que de calor.