Los gatos sin pelos llevan toda la vida dividiendo a la sociedad, entre los que odian y dicen «parecen ratas sin pelo» y los que los aman por sus peculiaridades. No venimos a crear más debate, venimos a darles el hueco que se merecen en nuestros corazones, señalando las mejores razas de gatos sin pelos y desmintiendo el mito de «los gatos sin pelos no dan alergia».
Los gatos sin pelos son reales y esa peculiaridad se debe a una mutación genética natural, de hecho, se cree que una nueva raza de gato sin pelo puede nacer cada 2 décadas, aproximadamente. Un gato sin pelos es un animal muy raro, eso significa que no es barato, ni fácil de encontrar, ni tampoco fácil de criar, ya que precisan de ciertos cuidados que un gato normal no necesita.
Hay un mito que queremos desmentir antes de empezar a hablar sobre estas maravillosas razas de gatos, y es que hoy una creencia popular que indica que los felinos calvos no dan alergia. Queremos aclarar que no todas las personas alérgicas a los gatos tienen la misma respuesta inmunológica.
Para más inri, lo que da alergia no es en sí el pelo de los gatos, sino una hormona (Fel D1) que está presente en varios órganos, en la saliva y en la orina del animal. Es posible que un gato con el gen de la calvicie sea nuestra solución a poder vivir con gatos y sin sufrir alergias, pero como decimos, depende de cada caso concreto.
Principales razas de gatos sin pelo
Los gatos con el gen de la calvicie no abundan demasiado, pero sí que es cierto que hay varias razas. Vamos a mostrar a continuación, algunas de las razas principales por si estamos buscando felinos sin pelos. Recordemos que son gatos difíciles de conseguir, muy caros y que necesitan muchos cuidados.
Nosotros siempre apoyamos la adopción de animales, ya sea a través de protectoras, o recogiendo nosotros mismos de la calle a algún animal desamparado. No recomendamos recurrir a la compra a través de ninguna plataforma, puesto que eso romantiza, quita importancia e ignora la realidad y es que las hembras son explotadas hasta la extenuación y viven en condiciones infrahumanas.
Sphynx o gato esfinge
Es de las razas más famosas y más «fáciles de encontrar». Un ejemplar de esta raza suele rondar los 1.000 euros, ya depende del sexo, la edad y hasta del color de sus ojos y si tiene alguna mancha en la piel o no.
Aunque su aspecto no nos pueda parecer tierno y agradable, son gatos muy cariñosos, tranquilos, dóciles, aunque a veces puede asomar un carácter fuertecillo. Estos gatos necesitan unos cuidados muy especiales, aunque son gatos muy sanos, por ejemplo, hay que lavarlos a menudo para evitar que su piel se engrase y eso de como consecuencia problemas en la piel.
Don Sphynx (Donskoy)
Es una especie de variante del gato egipcio originaria de Rusia, pero no. Tras varias investigaciones se descubrió que no son familiares del gato esfinge, así que son razas diferentes. Por norma general son animales muy calmados, hogareños, sociables y perfectos para familias con niños.
Recordamos que un gato sin pelo no es del todo apto para personas alérgicas, así que habría que revisar algunos factores antes de adoptar o comprar por varios miles de euros uno de estos gatos con calvicie genética.
Elf Cat
Un gato un tanto peculiar con orejas redondeadas y curvas hacia atrás. Se trata de una raza de gato sin pelo que es de gran tamaño llegando incluso a pesar hasta 10 kilos. Esta raza en concreto es un cruce entre el gato esfinge y la raza de gato (no calvo) American Curl.
Una raza de reciente creación que ha dado como resultado un gato robusto, grande que puede incluso alcanzar los 10 kilos de peso. Tanto es así que se le considera la raza de gato más grande, dentro del grupo de gatos sin pelo, claro.
Bambino
Una raza muy peculiar que se le reconoce fácilmente por ser paticorto. Se trata de un cruce de razas entre el gato esfinge y el munchkin, que es el famoso gato (con pelo) de patas cortas que tantas y tantas veces hemos visto en vídeos de Internet sobre todo en vídeos de japoneses.
El Bambino, es una raza muy reciente. A diferencia de otros gatos calvos, este felino tiene la piel más seca, por lo que requiere de menos cuidados. Con respecto a su carácter, es confiado, cariñoso, pero hay ejemplares muy independientes, les gusta jugar y son aptos para familias con hijos.
Koana
Un gato de origen hawaiano que surgió en la era de los 2000 y más de 20 años después sigue sin tener su reconocimiento como raza. Hay muchas hipótesis en torno a este felino, ya que se cree que es una mutación genética natural del gato esfinge, pero nadie ha podido demostrarlo aún.
Lo más característico de este felino, aparte de no tener pelo y las manchas de su piel (las cuales se creen que están divididas estratégicamente por todo su cuerpo y no hay dos gatos iguales) son sus arrugas. Se trata de un felino muy tranquilo, que disfruta del hogar, necesita cuidados especiales y es bueno con niños.
Levkoy
También se le conoce como Levkoy ucraniano y, tal y como su nombre indica, procede de Ucrania. Este felino sin pelo también tiene unas orejas peculiares, pero en este caso su curvatura es hacia dentro y nos recuerda a Dobby de la saga de Harry Potter.
Una raza que no fue reconocida hasta 2011 aunque se creó en el año 2000 y es un cruce entre la raza Scottish Fold y Donskoy. Lo curioso de este gatito es que no tiene pelo, por eso está en este listado, lo que tiene es como una pelusilla que recubre todo su cuerpo.
Peterbald
Otro gatito que no termina de ser calvo al 100%, ya que tiene una finísima capa de pelo (nacen con ella) de tan solo unos milímetros de largo. Ese pelo no le acompaña toda la vida, sino que lo pierde a lo largo de su vida. Al igual que pasaba con el gato Levkoy ucraniano, la piel es seca y no requiere tanto cuidado como los gatos calvos 100%.
Se trata de otra raza joven originaria de San Petersburgo, y es un cruce entre Donskoy, de ahí su semejanza con el gato esfinge y con un gato siamés, de ahí sus ojazos azules y sus manchas en la piel. Su carácter es afable, tranquilo la mayor parte del día, bueno para familias con hijos y son gatos sanos.