¿Un niño de 12 años puede ir al gimnasio?

edad a la que pueden ir al gimnasio

Los jóvenes pueden acudir a un gimnasio para entrenar por diversas razones, como mejorar su forma física, mejorar su estética corporal, su crecimiento personal y su bienestar mental. Además, pueden intentar prevenir problemas de salud futuros y, lo que es más importante, relacionarse socialmente con compañeros y personas mayores, una experiencia que puede enriquecer significativamente sus vidas.

Sin embargo, hay casos en los que no se exige a las personas que esperen a alcanzar una edad específica para utilizar las instalaciones del gimnasio de forma independiente, sin la presencia física de sus padres o tutores legales. ¿Puede un niño de 12 años puede ir al gimnasio? En este artículo te lo explicamos.

Las ventajas del entrenamiento de fuerza para niños

niños en el gym

Ideas erróneas y creencias ampliamente aceptadas. ¿Es posible que el entrenamiento de fuerza, cuando se practica desde una edad temprana, pueda tener efectos perjudiciales para el crecimiento o plantear riesgos para la salud de los niños o adolescentes?

Este tema puede ser uno de los más tergiversados, en particular entre quienes no participan en el culturismo y los deportes de fuerza. Por lo tanto, antes de abordar la pregunta principal de este artículo, nuestro objetivo es aclarar los hechos relacionados con el entrenamiento de fuerza en niños y adolescentes.

Resulta realmente sorprendente que haya quienes sigan afirmando que una justificación para la implementación de una edad mínima para el acceso sin supervisión a las instalaciones del gimnasio es la creencia de que «el entrenamiento de fuerza puede ser perjudicial para los niños». Esta afirmación es particularmente desconcertante a la luz de la acuciante crisis sanitaria que enfrenta el mundo occidental, caracterizada por una prevalencia significativa de sobrepeso y obesidad entre niños y adolescentes.

Es fundamental prestar atención a los datos alarmantes: en varias naciones europeas, la prevalencia de inactividad física entre niños y adolescentes fluctúa entre el 10% y el 39%, y hasta el 60% realiza solo una actividad física mínima a lo largo del día. Esto indica que solo 4 de cada 10 niños cumplen con las pautas de actividad física diaria adecuadas para su edad. A pesar de esto, algunos expresan preocupación por la falta de entrenamiento de fuerza, cuando, de hecho, el problema más acuciante es la insuficiente movilidad general.

Si bien es cierto que los programas de entrenamiento de fuerza mal diseñados, que no se adaptan a las capacidades físicas del individuo independientemente de su edad, pueden entrañar riesgos, existen pruebas científicas sustanciales que respaldan la idea de que el entrenamiento de fuerza, cuando se implementa con una progresión adecuada de intensidad y volumen y bajo la guía de un profesional, puede ofrecer beneficios significativos para el desarrollo físico y psicológico de niños y adolescentes.

Razones por las que deben entrenar desde jóvenes

menores tirando peso

Hasta finales del siglo XX, no existían pruebas empíricas suficientes para establecer definitivamente la idoneidad del entrenamiento de fuerza en la primera infancia. Se puede afirmar que el organismo humano es capaz de entrenarse durante toda su vida. Sin embargo, esta capacidad de entrenamiento puede experimentar variaciones considerables que están influenciadas por la etapa de desarrollo del individuo.

No existe una edad designada en la que los niños deban comenzar a entrenar la fuerza. Pero es necesario introducir esta práctica de forma modificada durante la infancia (específicamente la preadolescencia) en lugar de esperar hasta la adolescencia, por varias razones importantes.

En las primeras etapas del desarrollo, la ejecución de habilidades motoras, que incluyen correr, saltar y lanzar, mejora tanto en niños como en adolescentes. Sin embargo, los avances son más pronunciados en los niños.

Crecimiento de los jóvenes por etapas

a que edad pueden ir al gym

La razón, arraigada en las etapas de desarrollo de los niños y las niñas, es que antes de la pubertad, demuestran una mayor plasticidad neuronal, lo que mejora su preparación para adquirir habilidades motoras esenciales y fuerza fundamental, lo que los vuelve más adaptables al desarrollo mental y físico.

Durante la preadolescencia, existen ventanas de oportunidad particulares que pueden facilitar una aceleración natural en la adaptación de varias cualidades biomotoras. No integrar el entrenamiento de fuerza durante estos períodos críticos podría obstaculizar tanto el desarrollo presente como futuro de habilidades esenciales, como la coordinación intramuscular e intermuscular, así como el control motor general.

A medida que un niño entra en la adolescencia, la importancia de los atributos físicos avanzados, como las habilidades específicas del deporte, la potencia y la hipertrofia, se vuelve más pronunciada, en gran medida debido a los cambios hormonales característicos de esta fase del desarrollo, en particular la mejora del entorno androgénico interno.

A la luz de esta información, participar en un entrenamiento en el gimnasio, que incluye ejercicios con el peso corporal, puede servir como un medio excepcional para desarrollar fuerza, disfrutar del proceso, fomentar la adherencia y establecer hábitos que las personas pueden mantener hasta la edad adulta.

Cuando el entrenamiento de fuerza se estructura con una progresión adecuada en intensidad y volumen, y se lleva a cabo bajo la guía de un profesional calificado, puede producir ventajas significativas para el estado físico y el crecimiento psicológico de los niños y adolescentes. De hecho, la omisión del entrenamiento de fuerza durante estas etapas de desarrollo puede obstaculizar tanto la adquisición presente como futura de capacidades físicas, que abarcan la coordinación intramuscular e intermuscular, así como el control motor.

¿Cuál es la edad mínima requerida actualmente para que las personas participen en el entrenamiento en el gimnasio?

La edad mínima requerida para utilizar las instalaciones del gimnasio de forma independiente, sin la supervisión de tutores legales, puede variar según el país, la ciudad, la provincia o las políticas individuales del gimnasio.

Por lo general, se establece un requisito de edad mínima de aproximadamente 15 años. Sin embargo, algunos gimnasios han aumentado la edad para el uso independiente a 12 años, sujeto a la aprobación previa de sus padres o tutores legales.

Además, es concebible que ciertos gimnasios permitan a los menores de la edad mínima utilizar las instalaciones para necesidades específicas, siempre que se cumplan los criterios médicos informados y se obtenga la autorización de los padres o tutores legales. En tales casos, la supervisión estará a cargo de un entrenador que esté debidamente calificado para realizar sus funciones.

El establecimiento de una edad mínima tiene como objetivo salvaguardar la seguridad y el bienestar de los menores, dado que el entorno del gimnasio puede presentar riesgos específicos si no se implementan las medidas adecuadas.

Espero que con esta información puedan conocer más sobre si puede ir un niño de 12 años al gimnasio.