No quiero sonar envidiosa, pero tan solo los afortunados comen en casa cada día. Algunos trabajadores tienen jornada completa o partida, y nos les resulta práctico volver a casa para comer. Por eso, la mayoría que descuida su alimentación prefiere ir a un bar cercano para pedir un menú; mientras que los más concienciados con el estilo de vida saludable (y la economía) optan por llevarse un tupper de casa. Y, por si no lo sabías, el mundo de los tuppers es todo un universo que te va a encantar descubrir. No todos son válidos para cualquier alimento, además de que estoy segura de que no sabes cuidarlos correctamente.
A continuación te enseñamos todo lo relacionado con las fiambreras, recipientes, tuppers o como prefieras llamarlos.
¿Cómo elegir el tupper adecuado?
Alguna vez te hemos hablado del método que anima a cocina solo un día a la semana, para evitar que pierdas el tiempo todos los días en la cocina. Mediante esta técnica tendrás que guardar las comidas en tuppers, que luego meteremos en el congelador o en el frigorífico. Ciertamente, ahorras mucho tiempo y mejoras tu alimentación. Ya no tendrás que ponerte a cocinar al llegar a casa después del trabajo, por lo que evitarás saltarte la dieta.
Existen numerosos tipos de tuppers, con diferentes formas, tamaños y materiales. Es por eso que debes prestar especial atención para saber si puedes calentar la comida en el microondas o comer directamente de ellos. La gran duda aparece con las fiambreras de plástico, ¿se pueden introducir en el microondas sin miedo a que las sustancias se pasen a los alimentos? Para evitar entrar en histeria, lo primero que debes hacer (además de leer las etiquetas) es darle la vuelta al envase y fijarte en los símbolos.
Como ves, podemos encontrar sus diferentes usos, si son aptos para determinados electrodomésticos, de qué plástico están fabricados, etc. En cuanto al plástico, los más peligrosos son los que contengan el número 3 o 6.
¿Cómo cuidar correctamente nuestra fiambrera?
En principio, no existe ningún problema en guardar nuestra comida en tuppers de plástico, cristal o aluminio. Incluso, no importa si son los de la oferta del Mercadona. Lo que debes tener en cuenta es que si vas a calentar esa comida en un futuro, no todos sirven; tan solo los que tengan un código concreto serán aptos.
¿Cómo se limpia un tupper?
Pues aparentemente es sencillo. Si optas por limpiarlo a mano, límpialos con la parte amarilla de un estropajo. El problema es que si queda grasa o salsa de los alimentos, te será difícil eliminar más adelante. Estoy segura de que todos tenemos en casa un tupper de color rojo o naranja, gracias a la salsa de tomate de unos macarrones. Para evitar que esto suceda, elimina el exceso con papel de cocina y luego friégalo para que no se tiña de color.
Si lo vamos a meter en el lavavajillas, debes comprobar que es apto para este electrodoméstico; de lo contrario podría empezar a desmoldarse y ser imposible de cerrar. Además, se pueden provocar transferencias de estos plásticos al organismo. Con fijarnos en la parte inferior del tupper o en la etiqueta del envoltorio, encontraremos la información necesaria.
¿De cristal o de plástico?
Por supuesto, todo lo que sea de cristal es mucho mejor que el plástico para calentar. Asimismo, resultan más fáciles para comer, no se tiñen, no dejan mal olor, no transfieren sustancias a nuestra comida y no se deterioran con el paso del tiempo. Tan solo tendrás que tener cuidado de que no se caiga, aunque la mayoría están hechos de un cristal duradero y a prueba de golpes.
Si bien es cierto, la versión de cristal pesa más que el plástico, por lo que puede ser un estorbo si vas cargado en el transporte público.
Descubre las fiambreras eléctricas
Por último, te quiero descubrir las fiambreras eléctricas. Hay oficinas o momentos en los que no disponemos de un microondas para calentar la comida. Con este tipo de tuppers el problema se acaba. Con tan solo enchufarlo a la corriente, el tupper calentará tu comida, sin riesgo a que se queme. Puedes encontrarlo en Amazon a un precio bastante asequible: