Sirsasana se considera la cumbre de todas las posturas de yoga y tiene una importancia significativa para los yoguis debido a sus numerosas ventajas que se extienden más allá de los beneficios típicos del yoga. De hecho, es la postura inicial practicada en la serie Sivananda.
En este artículo vamos a contarte cómo dominar la Sirsasana en yoga y cuáles son todos sus beneficios para nuestro organismo.
¿Qué implica la postura sirsasana?
Sirsasana, conocida en español como parada de cabeza, parada de manos o equilibrio, es una postura invertida importante y exigente, especialmente para principiantes. Esta postura cambia nuestra perspectiva, lo que lleva a una desorientación en la percepción espacial, ya que estamos acostumbrados a estar erguidos.
En esta posición, los antebrazos, las manos y la cabeza descansan en el suelo, mientras que el tronco y las piernas permanecen erguidos.
Sirsasana activa el chakra de la corona (Sahasrara), lo que la convierte en una de las posturas de yoga más importantes. En este centro energético se produce la unión sagrada de Shiva y Shakti, fusionando la conciencia con la materia y la energía, así como el alma individual con el alma suprema. Al despertar la energía kundalini, asciende por los chakras inferiores hasta llegar al Sahasrara, para finalmente regresar a su fuente de origen.
Beneficios
Estos son los beneficios que podemos obtener en nuestro cuerpo sea practicamos la Sirsasana:
- Rejuvenece tanto la mente como el cuerpo en su conjunto. Además, alivia la ansiedad y diversas afecciones psicológicas que sirven como factores subyacentes a dolencias como el asma, la fiebre del heno, la diabetes y los desequilibrios relacionados con la menopausia.
- Aborda diversos tipos de problemas nerviosos y glandulares, en particular los asociados con el sistema reproductivo. Además, contrarresta el impacto de la gravedad en el cuerpo.
- Alivia el estrés en la espalda al tiempo que fomenta la renovación de los tejidos de las piernas y la región abdominal.
- Además, la presión de los órganos abdominales sobre el diafragma mejora la exhalación profunda, lo que da como resultado la expulsión de un mayor volumen de dióxido de carbono de los pulmones.
Cómo hacer la Sirsasana paso a paso
A continuación, vamos a ver una guía detallada que describe los pasos para realizar Sirsasana:
Comienza colocándote en Vajrasana (arrodillándote en el suelo mientras descansas sobre los talones) sobre una colchoneta de yoga antideslizante, respirando profundamente varias veces para relajar completamente el cuerpo (cerrar los ojos puede ayudarte a lograr una sensación más profunda de relajación). Para aliviar cualquier molestia en los codos o la cabeza, utiliza una esterilla de yoga. Con las manos opuestas, toma los codos para establecer el ancho de los hombros y luego bájalos hasta el suelo.
Permite que los codos se relajen (mientras los mantienes fijos) y entrelaza los dedos. Coloca la parte más alta de la cabeza sobre la esterilla, apoyándola frente a las manos para que brinden apoyo a la cabeza.
Levanta las rodillas y mueve los pies en dirección a la cabeza. Si llegas a un punto en el que ya no puedes caminar, dobla las rodillas y da un paso más.
La cabeza debe estar alineada con las caderas. Contrae los músculos abdominales para elevar los pies mientras acercas las rodillas al pecho lo más posible. Una vez que hayas alcanzado la estabilidad, comienza levantando primero las rodillas, luego los pies, desdoblando las piernas en segmentos.
Consejos para ayudarte a conseguirlo
Vamos a ofrecerte algunos tips y sugerencias para simplificar la postura sobre la cabeza:
- Al colocar los codos en el suelo y girar las palmas hacia arriba, creas una situación en la que la piel de los codos queda «atrapada» y no puede moverse, lo que ayuda a mantener los codos firmes. Asegúrate de colocar un dedo meñique frente al otro en lugar de apilarlos, ya que esto evitará posibles lesiones.
- Inicialmente, la distribución del peso debe repartirse entre la cabeza, los antebrazos y los codos. Con la práctica constante, te darás cuenta de que puedes colocar más peso en la cabeza en comparación con los codos, o al revés. Si te cuesta levantar las piernas, concéntrate en practicar la postura del delfín para fortalecer el abdomen y los brazos.
- No pierdas la esperanza. Lograr esta postura no es sencillo. Entrenar y acondicionar el cuello requiere tiempo, así que recuerda moverte con fluidez y sin forzarlo.
¿Cuánto tiempo se necesita para dominar Sirsasana?
Como todas las posturas, esta depende en gran medida de la persona, su práctica y las lesiones existentes. Algunas pueden requerir unos días, mientras que otras pueden llevar meses o incluso años. Numerosos factores pueden influir en esto. Sin embargo, si mantienes una práctica diaria, normalmente puedes lograrlo en un mes (la constancia es crucial). Recuerda no comparar tu progreso. Respeta tu propio cronograma (ya que es único) y, cuando menos lo esperes, lo lograrás.
Contraindicaciones
Si bien esta postura ofrece numerosas ventajas, es importante considerar las contraindicaciones y, lo más importante, prepararse con varias semanas de anticipación calentando y fortaleciendo adecuadamente el cuello (hay talleres de Sirsasana que ofrecen alternativas para esto).
Por lo tanto, debes evitar practicar Sirsasana si:
- Tienes problemas en el cuello, como dolores de cabeza o migrañas
- Hipertensión
- Enfermedades cardiovasculares
- Trombosis
- Arteriosclerosis
- Catarro persistente
- Estreñimiento persistente
- Problemas en los riñones
- Sangre contaminada.
- Miopía importante
- Vasos sanguíneos frágiles en los ojos
- Conjuntivitis
- Glaucoma persistente
- Inflamación presente en los oídos.
- Cualquier tipo de sangrado que se produzca en la cabeza. Esto incluye casos durante la menstruación o el embarazo, aunque si la futura madre ya ha realizado esta práctica anteriormente, puede continuar hasta que el bebé esté en posición cabeza abajo.
Esta postura es bastante completa, pero exige práctica, ya que está clasificada como media a avanzada. Por lo tanto, abórdala con cuidado y sin forzar tu cuerpo. Presta mucha atención a sus necesidades a medida que te vas adaptando poco a poco a la posición. Si no puedes lograrlo, no hay por qué preocuparse, simplemente indica que el momento no es el adecuado. Cuando te sientas preparado, inténtalo de nuevo.
Espero que con esta información puedan conocer más sobre cómo dominar la Sirsasana y los beneficios para el cuerpo.