Estoy bastante segura de que esto causará cierta controversia porque muchos de vosotros dirán: «no necesitas una gran configuración» o «el arco no es necesario«. Pero estáis equivocados. En mi opinión, una gran técnica es necesaria si quieres llevar tu press de banca a cargas muy pesadas. A continuación te enseño tres maneras de sacar el máximo provecho a tu entrenamiento, aunque existen muchas más y quizá hayas encontrado la tuya propia.
Así es cómo mejorarás tu press de banca
Paso 1
Cuando entrenes en un banco, normalmente es mejor comenzar desde arriba hacia abajo. A algunas personas les gusta comenzar de pie, y esa también es una gran opción.
Sujeta la barra con tu agarre favorito y levanta el cuerpo sobre la almohadilla presionando primero la parte superior de la espalda. Los pies pueden mantenerse bajos o altos, no importa. El objetivo es atornillar la parte superior de la espalda al banco, presionando y retrayendo las escápulas y arqueando el tórax.
Paso 2
Después de colocar la parte superior de la espalda correctamente, deja caer el trasero en el banco, con el objetivo de acercarlo a los omóplatos. Nuevamente, arqueando en el tórax y no en la columna lumbar.
También deja caer los pies (si estaban apoyados en el banco) y asegúrate de que estén debajo de la rodilla o detrás de ella, ya que eso garantizará la transferencia de fuerza adecuada durante la ejecución del ejercicio. Necesitarás ese impulso de la pierna.
Paso 3
Ahora deberías tener 3 puntos de contacto sólidos, que deberían ser: la parte superior de la espalda, el trasero y los pies (o los dedos de los pies). A algunas personas les gusta hacer el press de banca aguantando el apoyo en los dedos de los pies y eso está completamente bien siempre que la federación en la que compitas lo permita. Si no compites, y tan solo estás entrenando, ¡hazlo sin problema!
Una vez que tienes la pose adecuada, estarás listo para desbloquear la barra y empezar a ejercitarte.
Llevas haciendo mal el press de banca toda la vida y no lo sabías