El buen tiempo cada vez está más cerca, por lo que dentro de poco tendremos que llevar camisetas de manga corta y tirantas, además de estar en bañador en la playa. Es decir: ¡hay que fortalecer los brazos ya! Con la excusa de que no tienes tiempo con la rutina de trabajo, llevas sin ir al gimnasio desde que hiciste la comunión. Así que para que no puedas decir que no, te descubro los mejores ejercicios para fortalecer los tríceps con tu propio peso.
Muchas personas caen en el error de pensar que para tener unos brazos fuertes hay que centrarnos exclusivamente en el bíceps. Confía en mi, el brazo adquiere otra forma cuando desarrollas el tríceps. Además, ya no es solo una cuestión de estética, para estar bien equilibrado tendrás que trabajar todos los músculos de tu cuerpo.
Flexión Narrow
La flexión narrow, también conocida como la de tríceps, es bastante difícil de conseguir si no tienes fortalecido este músculo. La mayoría de nosotros realizamos las flexiones con una mayor amplitud, por lo que tenemos un mayor trabajo de espalda y pecho. En este caso, los brazos permanecerán lo más cerca posible del cuerpo y subirás con la ayuda de tus tríceps. Tus codos siempre deben apuntar hacia atrás.
Tricep Bow
Una alternativa más «sencilla» a las flexiones de trícep es realizar este ejercicio. Puedes apoyar tus rodillas hasta que domines el movimiento. Tendrás que apoyar los antebrazos en el suelo y seguidamente estirar los brazos de manera completa. Es un ejercicio más sencillo porque permite «reposar» el brazo en el suelo e impulsarte hacia arriba.
Fondo en banco con las piernas elevadas
Otro ejercicio clásico es el fondo de tríceps realizado sobre un banco y con las piernas elevadas. Hay personas que apoyan y flexionan las piernas para ayudarse en el levantamiento. Si queremos evitar esa tentación y realizar un rango de movimiento más profundo, eleva las piernas y estíralas. Recuerda que los codos siempre deben ir hacia atrás y manteniendo los brazos cerca del cuerpo.
Extensión de tríceps
Muchos realizan este ejercicio con la ayuda de una máquina o polea. Te animo a probar con un apoyo (banco, cajón) y tu propio peso. Vas a notar lo increíblemente difícil que es el ejercicio y la falta de fuerza que tienes. Como en todos, busca una alternativa menos intensa apoyando las rodillas en el suelo.
Flexión cruzada
Por último, esta flexión es otra de las más complicadas. Cruza las manos, de manera que tus brazos realicen una X al subir y bajar.