¿Qué aportan los higos secos concretamente?
Los higos son frutas de temporada y termina en octubre. No obstante podemos seguir disfrutando de ellos a lo largo del invierno, gracias al proceso de secado. Éste nos deja un resultado dulce, energético y con grandes beneficios para la salud.
Los higos secos tienen en torno a un 80% de agua en su composición. Además, son ricos en hidratos de carbono y azúcares naturales (fructosa, sacarosa y glucosa). Su elevado contenido en azúcares puede hacer que no sean recomendables en dietas de adelgazamiento. Sin embargo, su aporte de energía lo convierten en una alternativa ideal para personas activas y deportistas.
Estos son ricos en vitamina A, grupo B, C y E; y minerales como el hierro, calcio, potasio, magnesio, zinc, fósforo y cobre.
En relación a los higos frescos, los secos tienen una mayor cantidad de azúcar, siendo en este sentido más recomendables los frescos, dependiendo siempre de cada persona; y es que los secos pueden tener tres veces más calorías que los frescos. Sin embargo, cuando están secos, se potencia su contenido en potasio y fibra, así como el aporte restante de minerales y vitaminas.
Beneficios básicos de los higos secos
- Gran aporte de energía, excelente para personas deportistas o en etapas de mayor rendimiento físico o intelectual
- Muy ricos en fibra ideales para tratar el estreñimiento y favorecer la salud digestiva
- Ideal para los huesos, músculos y sistema nervioso por su contenido en calcio y magnesio
- Gran aporte de hierro y vitamina B ideal para tratar la anemia
- Sus propiedades expectorantes ayudan a limpiar los pulmones de mucosidad en procesos catarrales