Empezar el día después de pasar por el servicio te ayuda a sentirte mejor y a evitar que te sientas hinchado a lo largo del día. Es posible que tengas dificultades para evacuar por la mañana, por lo que está bien saber qué alimentos y bebidas pueden reducir los motivos de padecer estreñimiento.
El desayuno tiene este nombre porque estamos rompiendo el ayuno después de varias horas sin comer. Al tomar algo por la mañana y llevar comida al tracto gastrointestinal, también estamos despertando al intestino para que ponga en marcha el proceso de digestión. La digestión es algo automático que sucede en el cuerpo con el primer bocado que damos a los alimentos y los bajamos por el cuerpo. Ese movimiento de las paredes del tracto gastrointestinal se llama peristalsis.
Conforme el cuerpo empieza a mover tu desayuno por el tracto gastrointestinal, este sigue moviéndose a través de los alimentos que aún pueden estar en tu intestino desde el día anterior.
Desayunos anti estreñimiento
A continuación descubrimos los mejores desayunos para empezar el día con energía y ligero.
Avena
Tomar avena a primera hora del día es un hábito que agradecerá tu intestino. Este cereal es una buena fuente de fibra soluble e insoluble. Por lo que ayudará directamente a prevenir el estreñimiento.
La fibra soluble absorbe el agua, que hace que las heces sean grandes, suaves y más fáciles de pasar. La fibra insoluble, en cambio, se mueve más rápidamente a través de tu tracto gastrointestinal, lo que promueve la regularidad y ayuda a prevenir el estreñimiento. Por si fuera poco, la avena es un prebiótico, que actúa como una fuente de combustible de probióticos en nuestro intestino
Café
Hay quienes aseguran que hasta que no se toman una taza de café, no son personas. Muchos se escudan en que les ayuda a despertarse y afrontar el día con energía. Y lo cierto es que también puede activar tu intestino. No es un mito eso de ir al baño después de tomar café.
El café con cafeína puede indicarle a tu estómago que produzca más ácido y aumente los movimientos del colon, lo que provoca un efecto laxante en algunas personas. Incluso el café descafeinado tiene un efecto similar en nuestros intestinos.
Fruta
Es posible que te encante desayunar tostadas o huevos revueltos, pero también podrías añadir un poco más de fibra tomando fruta. Este vegetal es rico en agua y fibra, y ambos forman el pack indispensable para ayudarte a ir al baño.
Añadir ciertas frutas a los desayunos, como los plátanos, tiene efectos positivos más allá del aporte de fibra. El plátano es una fuente natural de inulina, que es el tipo de fibra que ayuda a aliviar el estreñimiento o evita que ocurra.
Kéfir y yogur
Algunos productos lácteos, como la leche y el queso, pueden hacer que tengas diarrea o hacer que te sientas hinchado. En cambio, el kéfir es una fuente única de productos lácteos, al igual que el yogur, porque también es rico en probióticos, y la ciencia sugiere que estas bacterias beneficiosas pueden ayudar a que tu intestino se mueva.
Un estudio examinó a personas que después de beber kéfir de manera diaria durante cuatro semanas, la frecuencia y la consistencia de las heces aumentaron y el uso de laxantes disminuyó en personas que viven con estreñimiento crónico.
Además, Lactobacillus casei, la cepa probiótica que se encuentra típicamente en el yogur y el kéfir, ayuda a ablandar las heces duras.
Cereales altos en fibra
El cereal en realidad puede ser un desayuno muy sensato. Es una fuente fácil de carbohidratos energizantes y fibra saludable. Pero en algún punto del camino, el cereal se corrompió y se apoderó de las marcas azucaradas que se preocupan más por brindarle una caricatura convincente que una comida saludable real.
Pero no dejes que tu infancia de Cookie Crisps socave el potencial del cereal como un sabroso sistema de suministro de fibra. Se recomienda leer el etiquetado de la caja y elegir un cereal que sea específicamente alto en fibra. Un ejemplo podría ser All-Bran de Kellogg’s con 10 gramos de fibra por porción.
Batidos
Hacer batidos con los ingredientes adecuados (frutas, semillas, verduras, legumbres, cereales integrales y productos lácteos ricos en probioticos) es asegurarnos de tener un gran desayuno. Tomarte uno al empezar el día hace que las cosas funciones.
Son la mejor elección en comparación con los jugos porque cuando haces un batido, estás reteniendo toda la fibra de las frutas, verduras, frutos secos y otros alimentos que estés usando. En cambio, cuando hacemos zumo eliminamos la fibra de los alimentos.
Los batidos son una forma sencilla y sabrosa de tomar todos estos alimentos ricos en fibra de una sola vez. Además, es una buena forma de estar correctamente hidratado para evitar el estreñimiento y ayudar al tránsito intestinal.
Tostadas integrales
Tomar un bagel o una tostada es una forma sencilla de terminar el desayuno rápidamente. Pero si defecar está en nuestra lista de prioridades, hay que tener en cuenta que no todos los productos de pan son iguales.
Los elaborados con cereales integrales pueden tener significativamente más fibra. Normalmente, los panes comerciales tienen muy poca cantidad de fibra, mientras que los de trigo integral pueden llegar hasta los siete gramos. Y lo mismo ocurre con las tostadas de pan blanco frente a las tostadas integrales.
Ciruelas pasas
Cuando se trata de combatir el estreñimiento, las ciruelas pasas pueden ser el truco más antiguo del libro. La ciencia moderna ha seguido demostrando los beneficios de comer ciruelas pasas para mantener los intestinos felices.
Un estudio de 2011 asegura que las ciruelas secas son seguras, apetecibles y más eficaces que el psyllium para el tratamiento del estreñimiento leve a moderado, y deben considerarse como una terapia de primera línea. Así que tomar desayunos con ciruelas pasas puede ser una gran opción.
Agua
El agua no es realmente un alimento para el desayuno. Pero se ha demostrado que la deshidratación aumenta las posibilidades de estreñimiento y, según el tipo de actividades que nos guste realizar por la noche (cervezas o vino), el desayuno probablemente sea el momento perfecto del día para tener un plan de rehidratación.
Si queremos seguir defecando con regularidad, incluir agua en la rutina matutina no nos hará daño.