Alimentos inflamatorios

carnes rojas

Entre los alimentos que provocan inflamación conocidos como alimentos inflamatorios se encuentran las carnes procesadas, el azúcar, los carbohidratos refinados, los aceites vegetales y de semillas y el alcohol, entre otros. Comprender este tema es importante porque el consumo excesivo de estos alimentos contribuye al desarrollo de condiciones perjudiciales, como presión arterial alta, cáncer, envejecimiento, Alzheimer, obesidad y diabetes tipo 2.

Por ello, vamos a dedicar este artículo a contarte cuáles son los alimentos inflamatorios, sus características y consecuencias de su consumo en exceso.

Efectos de los alimentos inflamatorios

alimentos inflamatorios

Por lo general, los alimentos que desencadenan la inflamación inducen estrés oxidativo, un resultado del desequilibrio entre los radicales libres y los antioxidantes disponibles en el cuerpo para la defensa.

Para mitigar estos efectos, es fundamental disminuir la ingesta de alimentos inflamatorios como fideos instantáneos, refrescos y pizzas. Se ha demostrado que estos alimentos en particular elevan los niveles de LDL, comúnmente conocido como colesterol «malo», y al mismo tiempo reducen los niveles de HDL, también conocido como colesterol «bueno». Además, el consumo de dichos alimentos puede provocar el desarrollo de resistencia a la insulina.

Alimentos inflamatorios

comida poco saludable

Azúcar

El azúcar de mesa, también conocido como sacarosa, se considera altamente inflamatorio debido a su contenido de fructosa y glucosa. El consumo excesivo de sacarosa se ha relacionado con el desarrollo de enfermedades graves como el cáncer de mama y problemas pulmonares. Las investigaciones indican que la ingesta de bebidas azucaradas, conocidas por sus altos niveles de azúcar, conduce a niveles elevados de ácido úrico, lo que provoca inflamación y resistencia a la insulina.

En el caso de la fructosa, su consumo excesivo puede provocar diversos problemas de salud como diabetes, hígado graso, obesidad, enfermedad renal crónica, cáncer e inflamación endotelial, que es un conocido factor de riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Es recomendable evitar el consumo excesivo de chocolate, dulces, refrescos, galletas y tartas por este motivo. Algunas personas incluso llegan a eliminar por completo estos elementos de sus dietas.

Carbohidratos refinados

Los carbohidratos, en su conjunto, suelen ser vistos desfavorablemente. Sin embargo, los tubérculos, frutas y verduras ofrecen valiosas ventajas al organismo debido a su alto contenido en fibra. Por otro lado, los carbohidratos procesados ​​contribuyen a la inflamación, creando así un entorno favorable para el crecimiento de bacterias intestinales asociadas con la obesidad.

La razón detrás de esto es que cuando los adultos mayores consumen carbohidratos refinados, como alimentos procesados, pan blanco, pasteles y galletas, sus niveles de glucosa en sangre aumentan. En consecuencia, se vuelven más susceptibles a desarrollar enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).

Aceites derivados de vegetales y semillas

La recomendación típica de los médicos es evitar aceites como el de soja debido a su alto contenido en ácidos grasos omega 6. En cambio, sugieren incorporar a la dieta alimentos ricos en omega 3, como el pescado azul. Si bien no existe un acuerdo unánime entre los especialistas, en general se recomienda evitar los aceites de semillas vegetales que se encuentran comúnmente en los alimentos procesados.

Carnes procesadas

La probabilidad de desarrollar diabetes, enfermedades cardíacas y cáncer de estómago y colon está asociada al consumo excesivo de carnes procesadas. En esta categoría se incluyen variedades como salchichas, tocino, cecina y carne ahumada.

El consumo de carnes rojas, como la carne de cerdo, ternera o cordero, puede desencadenar procesos inflamatorios y diversos problemas de salud, como presión arterial baja, enfermedades cardiovasculares, aterosclerosis y ataques cardíacos.

Grasas trans

los alimentos inflamatorios

La industria, a pesar de sus esfuerzos por eliminarlas, todavía incluye estas grasas no saludables en ciertas margarinas. Las grasas trans se pueden encontrar en diversos alimentos, entre ellos la comida rápida frita como las patatas, la bollería industrial y determinados tipos de palomitas de maíz.

Alcohol

Los especialistas tienen opiniones divergentes sobre el consumo de alcohol, ya que algunos sostienen que puede ofrecer ciertas ventajas mientras que otros lo desaconsejan rotundamente, lo que genera una falta de consenso en la materia.

Se ha demostrado que el consumo excesivo de alcohol eleva los niveles de proteína C reactiva (PCR), un indicador de inflamación. Además, la ingestión de alcohol puede provocar daños intestinales debido a la presencia de toxinas bacterianas originadas en el colon.

Zumos industriales

Es aconsejable elegir opciones de zumos naturales, ya que los zumos que no se derivan de fuentes naturales pueden desencadenar la liberación de citoquinas inflamatorias, elevando así la probabilidad de desarrollar enfermedades cardíacas, sufrir un ataque cardíaco o sufrir un derrame cerebral.

Helados

Si bien el helado es innegablemente delicioso, cabe señalar que esta delicia helada posee propiedades inflamatorias debido a su elevado contenido de azúcar y grasas saturadas. Estos factores contribuyen al aumento de los niveles de glucosa en sangre y a la presencia de colesterol «malo», también conocido como LDL. Aunque es un capricho preferido por muchos, es aconsejable ejercer moderación y abstenerse de un consumo excesivo.

Longaniza

El consumo de salchichas se ha relacionado con la elevación del colesterol «malo» (LDL) debido a su alto contenido de grasas saturadas, lo que puede provocar aterosclerosis, ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares. Además, la presencia de nitratos y nitritos en las salchichas puede inducir estrés oxidativo, aumentando el riesgo de desarrollar varios tipos de cáncer incluso en personas que por lo demás están sanas.

Para optimizar tu bienestar, se recomienda disminuir o eliminar la ingesta de alimentos inflamatorios y en su lugar incorporar alternativas nutritivas a la dieta. Aprovecha las propiedades antiinflamatorias de la col rizada, las sardinas, el brócoli, las naranjas, la granada y el aceite de oliva, que destacan por promover la salud y la vitalidad.

Realmente, no es que el listado de alimentos inflamatorios que hemos analizado estén totalmente prohibidos de consumir de forma proporcional. Lo importante es la consulta de estos productos con moderación a la vez que el 90% de nuestra alimentación está basada en comida saludable. Además, es necesario acompaña nuestro día a día con una actividad física lo suficientemente intensa para como para generar un gasto calórico extra y que ayude a regular nuestros niveles de azúcar en sangre y estar mucho más saludables.

Espero que con esta información puedan conocer más sobre los alimentos inflamatorios y sus consecuencias.