El té es una de las bebidas más consumidas a nivel global. Sin embargo, su uso en el deporte viene vinculado a una activación y estado más enérgico. Esto es debido a una relación de esta bebida con el aumento del metabolismo.
En este artículo, explicaremos como se relaciona el consumo de té y el metabolismo, para poder sacarle rendimiento en determinadas situaciones.
Té
El té es una infusión de las hojas y brotes de la planta del té (Camellia sinensis). Esta bebida es después del agua, la bebida más consumida mundialmente.
El té es característico por sus propiedades antioxidantes, vitaminas y minerales. Además, está relacionado con la diminución de la aparición de enfermedades degenerativas. Sin embargo, una de las características más valoradas en el ámbito del fitness es su papel en el incremento del metabolismo.
Diferentes tipos de té
Hay diferentes tipos de té, como, por ejemplo:
- Verde.
- Negro.
- Blanco.
- Rojo.
- Oloong.
La diferencia principal entre estos tipos con el tiempo de fermentación o el tiempo de exposición al aire. Según estos parámetros, se diferenciarán en un tipo u otro, variando enormemente su sabor, cantidad de cafeína y otros parámetros (productos químicos contenidos en el té).
Té y su relación con el metabolismo
El té, y en especial el té verde, es una de las bebidas más famosas por su efecto de incremento en el metabolismo. Aunque los incrementos y decrementos en el metabolismo que se pueden generar a través de los alimentos son reducidos, el té ha demostrado en ciertos estudios aumentar hasta 70 calorías diarias.
Aunque estas cifras calóricas son un poco escasas para concluir que ayudan a la pérdida de peso, su efecto generado en ciertas actividades físicas si podría verse reflejado en la pérdida de peso.
Cafeína
El incremento del metabolismo causado por esta sustancia es principalmente debido a la cafeína contenida en el té.
La cafeína tiene efectos estimulantes y energizantes, estimulando el organismo para generar el proceso de termogénesis (más calor y aumentar el gasto de calorías). Además, según análisis de la unidad de Columbia, la cafeína podría producir un aumento del 10% de la frecuencia cardiaca y presión arterial. Por lo que esto explicaría el incremento en el metabolismo.
Aunque el consumo de té está recomendado y es seguro, en ciertas situaciones está contraindicado. Alguna de estas enfermedades son las relacionadas con problemas cardíacos o ansiedad. A su vez, el consumo de té debe estar controlado, sin cometer excesos.