Un nuevo estudio relaciona los ultraprocesados con diferentes tipos de cánceres. La investigación ha sido realizada por el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal) tras la encuesta nutricional realizada a más de 8.000 personas en España.
Lo que se quería averiguar es si existe relación entre la mala alimentación y algunos tipos de cánceres. La investigación ha sido clara y entre los cánceres más propensos está el de colon y el de mama.
Este último está más relacionado con personas que fuman o que son exfumadores y a su vez llevan una dieta poco equilibrada donde los productos mayoritariamente son ultraprocesados.
Al igual que la pandemia ha hecho que muchos adopten una vida saludable, también hay una parte de la población española que se ha acomodado y su dieta no es todo lo variada y equilibrada que debería ser.
Una encuesta dietética deja entrever la mala alimentación de la población y sus riesgos
Según ISGlobal, las dietas europeas están compuestas de entre un 25% y un 50% de comidas y bebidas ultraprocesadas.
Cuando se habla de ultraprocesados se hace referencia a comidas y bebidas azucaradas, con sal, grasas y aditivos. En ese grupo entran los refrescos, bollería industrial, pizzas precocinadas, zumos no naturales, embutidos, etc.
No son pocos los estudios e investigaciones a nivel internacional que han demostrado la relación directa entre una mala alimentación y el desarrollo de algún cáncer. Y no solo eso, sino también una relación directa entre los procesados y ultraprocesados con accidentes cardiovasculares, diabetes, mortalidad prematura, etc.
El estudio de ISGlobal quería dar más certeza a dicha relación, así que se puso manos a la obra para ver si esta alimentación tan poco recomendada estaba relacionada con el cáncer de próstata, de mama o de colon.
Realizaron una encuesta dietética en diferentes provincias españolas a casi 8.000 personas. La mitad eran pacientes con cáncer y la otra mitad sin esta enfermedad.
En el cuestionario se recogía la información relacionada a la dieta de estas personas durante un año y los alimentos y bebidas se clasificaban según el nivel de procesamiento. Esto dio lugar al descubrimiento de una dieta empobrecida y mayoritariamente ultraprocesada.
La investigación concluye que el consumo de este tipo de alimentos está asociado a un riesgo elevado de sufrir cáncer de colon. Esta relación se explica, según la investigadora Dora Romaguera, por la escasez de fibra, frutas y vegetales en la dieta.
Con respecto al cáncer de próstata, no se ha llegado a ninguna conclusión que establezca una relación entre la alimentación y las consecuencias de esa enfermedad.
Sin embargo, en el caso del cáncer de mama sí que se han encontrado indicios de estar relacionados, sobre todo en personas que actualmente son fumadoras y también en exfumadores. Romanguera añade que ya se conoce el estrecho lazo entre este tipo de enfermedad en personas que fuman o han fumado y la mala alimentación.