En el ranking de las frutas que son muy parecidas entre ellas tenemos a las cerezas y las picotas. Son dos frutas que a simple vista parecen igual y que muchas personas confunden frecuentemente. Sin embargo, existen algunas diferencias entre picotas y cerezas.
En este artículo vamos a contarte cuáles son las principales diferencias entre picotas y cerezas.
Qué es una cereza
Una cereza es una pequeña fruta que pertenece a la familia de las Rosáceas, género Prunus, y es conocida científicamente como Prunus avium. Esta deliciosa fruta es originaria de Europa y Asia Occidental, pero se cultiva en muchas partes del mundo debido a su popularidad en la gastronomía y su agradable sabor.
Las cerezas son generalmente pequeñas, redondas y de color rojo intenso, aunque también existen variedades que pueden ser amarillas o negras. Su sabor puede variar desde dulce hasta ligeramente ácido, dependiendo de la variedad. La pulpa de la cereza es jugosa y tierna, con una textura agradable en la boca.
Estas frutas son ampliamente utilizadas en la preparación de postres, como pasteles, tartas, y helados, además de ser consumidas frescas como bocadillos saludables. También son una fuente de antioxidantes, fibra y vitamina C, lo que las convierte en un alimento nutritivo.
Se cosechan durante la temporada de verano, generalmente en los meses de junio y julio en muchas regiones. Su recolección se realiza a mano para evitar dañar las frutas y preservar su calidad.
Qué es una picota
La picota es una variedad específica de cereza que se distingue por ciertas características particulares. Aunque es una cereza, la picota tiene algunas diferencias notables en comparación con otras variedades.
La característica más distintiva de la picota es que tiene un pedúnculo largo y delgado que se adhiere firmemente a la fruta incluso después de madurar. Esto significa que, cuando se recolectan, las picotas se pueden separar del árbol sin dañar el tallo, lo que las hace ideales para ser consumidas frescas y presentadas en ristras colgadas, como se hace tradicionalmente en algunas regiones.
En cuanto a su sabor, las picotas suelen ser más dulces y menos ácidas que otras variedades de cerezas, lo que las convierte en una delicia para quienes buscan un sabor suave y afrutado. Su piel es generalmente de un tono rojo intenso y brillante.
Además de su sabor y apariencia, las picotas también son conocidas por su breve temporada de cosecha. Por lo general, se recogen durante un período de tiempo relativamente corto, generalmente a finales de primavera o principios de verano, dependiendo de la región y las condiciones climáticas. Esto las convierte en un manjar temporal que muchas personas esperan con ansias cada año.
Principales diferencias entre picotas y cerezas
Tamaño y color
La primera diferencia que vemos es el tamaño y color de cada uno de ellos. El color de las cerezas es un rojo más claro que el de las picotas y son de mayor tamaño, unos 2 cm de diámetro. Por sí solos, los mayales son más pequeños y oscuros, de color más intenso, entre granate y morado. Por lo general, estas diferencias de tamaño y color tienen mucho que ver con el tiempo de maduración y el clima o terreno en el que crecen. Tampoco es sólo una cuestión de física, ya que su tamaño y color también afectan su sabor y textura.
Cola y punto de unión
La siguiente diferencia obvia que nos ayuda a distinguir una cereza de una picota es si tiene tallo o no. Si tiene cola, es cereza, si no, es picota. Una de las características singulares de este último es que cae del árbol, dejando naturalmente este pedúnculo en él. De esta forma, la unión entre el fruto y el tallo queda completamente cicatrizada, permitiendo que el fruto se conserve mejor y por más tiempo.
Entonces es solo la cereza la que naturalmente sostiene y vende su tallo. Si lo quitamos, lo que estamos haciendo es exponer ese punto de conexión al aire, dejándolo desprotegido y manteniéndolo fresco por un período de tiempo más corto. Si al exprimir suavemente no sale jugo y la fruta permanece firme, entonces no hay duda de que se trata de una picota. Por tanto, también se puede decir que las cerezas, aunque más grandes, son más frágiles y menos resistentes que sus parientes.
Sabor y textura
Otra clave para diferenciar las dos frutas es el sabor. Ambas son dulces, jugosas y deliciosas, pero existen sutiles diferencias en la textura que nos ayudan a diferenciarlos. Las cerezas tienen un sabor más dulce y ácido, mientras que las picotas normales son más ácidas. También hay una diferencia en la textura de la carne, ya que la carne de la picota queda más rica y crujiente cuando la masticas.
Una cereza es más grande y menos carnosa que una picota, ya que suele tener un hueso interno más grande. Como resultado, tienen menos pulpa, un sabor más rico y concentrado y llenan más. La textura de la piel también es muy evidente, el color cereza es más delicado, el color cereza es más suave y terso.
Madurez
Comer fruta de temporada es una de las claves para aprovechar todo su sabor, aroma y potencial nutricional. En cuanto a las cerezas y las picotas, no hay duda de que a ambos les encanta el calor, por eso llegan cuando las temperaturas empiezan a subir. Sin embargo, cada uno tiene su momento preciso y su proceso de maduración, que es otra clave para distinguirlos.
La temporada de cerezas comienza a finales de primavera, entre mayo y junio, mientras que las variedades de picotas llegan más tarde a principios de verano. Esta madura más tarde porque lleva más tiempo. Lo ideal para asegurarte de este detalle es consultar la etiqueta del producto, en la que se debe indicar la variedad exacta de fruta.
Características y beneficios
Además de su sabor y jugosidad, tanto las cerezas como las picotas contienen propiedades depurativas y antioxidantes. Su valor nutricional es similar porque hay que recordar que, al fin y al cabo, hablamos de la misma fruta, destacando su aporte de hidratos de carbono, principalmente azúcares simples como la fructosa, la glucosa y la sacarosa. Asimismo, aportan altas cantidades de fibra, lo que ayuda a mejorar el tránsito intestinal.
En este sentido, los ácidos naturales contenidos en estas dos frutas actúan como estimulantes de las glándulas digestivas del organismo, y al contener pectina (fibra vegetal soluble), aportan un efecto laxante natural muy beneficioso.
Espero que con esta información puedan conocer más sobre las diferencias entre picotas y cerezas.